sábado, 15 de septiembre de 2007

Recuerdos sobre día de lluvia V.1

Era la primera vez que viajaba al sur, no estoy hablando de unas vacaciones en Chubut o Tierra del Fuego, hablo de la zona Sur, provincia de Bs. As.

Ella se consideraba una persona abierta, flexible, desestructurada y libre de prejuicios y ataduras de sentido común, pero en cierto sentido vivía en una burbujita, en la burbujita de capital federal, ya que no habían existido motivos (llamasé personas objetos o instituciones) que la llevaran fuera de su localidad de origen.

Un buen día (o un mal día) decide aceptar un trabajo que consistía en hacer encuestas, la simpática chica de recursos humanos armó un discursito divino en dónde enunciaba las grandes virtudes del trabajo, las comodidades, la gran paga, la poca cantidad de horas y etc; claro que ella era un poco ilusa en cuestiones laborales y se dejó engañar y aceptó gustosa.

Salió de la oficina con una serie de papeles, abre el sobre y lee "LANUS"

Bien, luego de hacer exhaustivas averiguaciones, encuentra 192381283091 maneras de llegar a destino, elije dos colectivos y emprende su marcha.

Se levanta temprano y algo nerviosa y preocupada sale de su casa cuando aún todos dormían, su madre creía que estaba en almagro... claro... ella es algo conservadora y si sabía del verdadero destino probablemente haría un escándalo que ella no tenía ganas de soportar, pero por las dudas, porque nunca se sabe qué puede pasar, a Papá le dijo la verdad.

Sábado de otoño nublado, calles desiertas y con aroma a humedad.
Finalmente llega a destino acompañada por una llovizna, hasta ese momento soportable.
Antes de comenzar el timbreo, decide preguntar en una casa de lotería unas ubicaciones ya que las calles no tenían carteles e incluso algunas estaban cortadas y había varios pasajes y diagonales, el señor le advierte de los peligros con los que puede encontrarse en el camino, y por citar un ejemplo le dijeron que podían raptarla, "no para violarla sino para sacarle los órganos"
Así que... con esa bendición emprendió su camino.

Se sentía como en otro mundo, calles sin asfaltar, casas sin timbre, unas muy diferentes de las otras en sus fachadas. Y sobre todo perros, por todos lados, encima que ella les tenía terror!!!

Para su mala suerte en la primer cuadra se equivocó en la forma de recorrido, ya que era bastante específica y para nada azarosa. Entre la cantidad enorme de papeles, planillas, e incluso la del instructivo que tenía todo el tiempo en la mano, la lluvia que los mojaba y el viento que ls volaba, conseguir las 6 encuestas que le exigían por día era una tarea tediosa y había empezado y continuado con el pie izquierdo.

La mayoría de las personas desconfiaban, miraban sospechosas a mi pequeño cartelito con el nombre de la consultora que llevaba con un alfijer de gancho en mi pecho. Vio puertas que nunca se abrieron, mucha gente que espió por la ventana pero no se dignó a responder y unas pocas que atendieron pero su respuesta era "sobre las elecciones?? noooo"

Su desesperación creía junto a la fuerza con la que caía la lluvia.
Varias veces tuvo que quedarse bajo los techitos que encontraba esperando que lloviera menos fuerte para poder continuar.

Ya pasado el mediodía sintió algo de hambre pero debía seguir caminando así que luego de varias cuadras encontró un quisco en dónde compró unas cerealitas (digo no, por qué no se compró un chocolate o algo más satisfactorio?) que fueron su almuerzo.

Luego de muchas negativas había recolectado 5 encuestas, y cada una de las personas había respondido que la inseguridad era el problema más grave de la provincia de Bs As y le comentaron para su alegría de su temor de responder la encuesta en la calle y que alguien pudiera entrar a su casa a asaltarlos.

En cierto momento siente la presencia de una persona cerca de ella, se da vuelta y ve a un hombre de unos 30 años que caminaba detrás de ella para la misma dirección. Digamos que estaba un poco mucho condicionada por los comentarios de los vecinos y sintió algo de temor, analicemos, a ver, para ser claros, lo que muchas personas describirían como "un negrito" bueno, esta persona cumplía con aquella descripción, ella decide cruzar, doblar, desviarse del recorrido y para su sorpresa el hombre casualmente iba para el mismo lugar, finalmente decide tocar un timbre cualquiera que no correspondía a los que debía encuestar pero no le importó porque fue lo primero que se ocurrió en ese momento de temor y nerviosismo. Para su suerte una mujer abrió la puerta y le ofreció pasar a realizar la encuesta dentro de su casa, bien, aca se me viene a la cabeza una analogía de dibujitos animados en la que el personaje debe elegir entre el asesino que está de un lado o tirarse del barco al agua llena de cocodrilos. Finalmente decidió entrar y realizar la encuesta por más que sabía que no iba a servirle.

Cuando salió llovía más fuerte que antes, veía los relámpagos, sentía los truenos retumbar mientras deseaba con todas sus fuerzas estar en su casa tomando un mate o simplemente durmiendo o leyendo o hacer cualquier otra cosa menos estar perdida en medio de Lanús en una esquina de mala muerte desierta y sola!!! Mojada, cansada y totalmente irritada.

Para empeorar las cosas suena el celular, su madre preocupada le pregunta a qué hora va a volver y donde está, y en ese momento de debilidad salió a la luz la faceta buenuda de ella, y le contó la verdad, obviamente ella reaccionó con mayor preocupación y alteración y prácticamente le exigió que volviera a su casa que era peligroso, que estaba inundado y que tal vez no podía regresar en colectivo etc etc. Ese tipo de personas que en ese tipo de situaciones no te ayudan sino que empeoran tu estado de ánimo, bueno, esa era su madre.

Ya con un nivel de irritabilidad que podría hasta definirse como desquiciada, ella decide apelar a su última estrategia, la lástima, "por favor señora es la única encuesta que me queda para poder irme a mi casa, vivo lejos etc etc"

Situaciones patéticas si las habré conocido en mi vida, esta gana por lejos
Un superyo tan zarpado, tan estricto, tanto le importaba la responsabilidad?? pesaba más que su propia autoconservación??

Por suerte al no conseguir esta encuesta decidió mandar todo al cuerno y antes de que el nivel de agua subiera más aún, llamó a su supervisora y le dijo que como estaba inundado iba a volver a su casa y que otro día volvería a terminar con ellas. Y si ella le decía que las terminara no sé qué desición hubiera tomado pero eso no sucedió.

El alivio que sintió al subir al primer colectivo fue indescriptible, ya una vez en capital se tranquilizó e incluso arriba del 85 pudo hasta leer unos apuntes de "Derecho a la información".

Efectivamente al día siguiente volvió a terminar con el proyecto, lo entregó y renunció.





Hay tantos tipos de trabajos como perfiles de personas.

A mí dame una oficina, la calle, no gracias :P

























Esta historia fue basada en hechos reales con algunos cambios hechos para exagerar el dramatismo del relato =P

2 comentarios:

Eli dijo...

Olvidé decir:

"En aquella ocasión, esoquenodependedemi estuvo a mi favor"

=D

just me dijo...

jajaja.....guau!!! que historieta! yo fui censista hace un par de años....ja....tambien senti algo de miedo al tener que estar haciendo esas encuestas...por suerte hubo gente que fue muy amable...será que me veian chiquita...jaja. bueno Eli todo sirve de experiecia no? esta bueo igual uqe hayas aceptado ese trabajo....por lo menos ahora ya sabes que eso no es para vos y que no te gusta.
Me hiciste acordar a mi cuando dijiste que a tu mama le mentiste pero que a papa le dijiste la verdad por las dudas....jajaja yo casi siempre hago eso, mi papa es algo mas comprensivo y mucho menos dramático, y auneuqe no siempre está de acuerdo con lo que hago el croe que prefiere dejarme en paz y que si me tengo que equivocar que me equivoque. Y a mi me gusta eso...
Besos

Desde 22/08/07